martes, 26 de octubre de 2010
Feng Shui - Teoría de los cinco elementos
La aplicación del Feng Shui en la vida cotidiana puede ser entendida como armonizar y energizar el ambiente donde las personas viven o pasan gran parte del tiempo. La teoría de esta armonización se basa en el orígen del universo y de la combinación de cinco elementos de la naturaleza: agua, madera, fuego, tierra y metal.
Para Feng Shui existe, en la combinación adecuada de estos elementos, la formación de un ciclo constructivo, cuando la armonía surge por la transformación positiva de los elementos: la madera alimenta el fuego; a través de las cenizas, genera la tierra; la tierra, por procesos naturales, genera el metal; el metal expele el agua de la tierra; el agua hace crecer la madera; la madera, cerrando el ciclo otra vez alimenta el fuego.
La madera representa el comienzo del ciclo vital, el color es el verde, su estación del año es la primavera, por alimentar el fuego, es considerada como un combustible y su energía se expande en todas las direcciones.
El fuego representa la culminación del ciclo de vida, su color es el rojo, la estación del año es el verano y su energía se expande hacia arriba.
La tierra es el momento de pausa en el ciclo vital, su color es el amarillo, representa el cambio entre las estaciones del año, es sólida, fija y variable al mismo tiempo, y su energía se mueve horizontalmente.
El metal es el puente del ciclo de los elementos, su color es el blanco y tonos metálicos, su forma es circular, la estación es el otoño y, su energía se mueve por dentro.
El agua representa el comienzo de un nuevo ciclo, su forma es ondulada, y su color es el negro o azul, la estación del año es el invierno y la energía es penetrante y flexible, así como las características reales de este elemento.
Para Feng Shui existe, en la combinación adecuada de estos elementos, la formación de un ciclo constructivo, cuando la armonía surge por la transformación positiva de los elementos: la madera alimenta el fuego; a través de las cenizas, genera la tierra; la tierra, por procesos naturales, genera el metal; el metal expele el agua de la tierra; el agua hace crecer la madera; la madera, cerrando el ciclo otra vez alimenta el fuego.
La madera representa el comienzo del ciclo vital, el color es el verde, su estación del año es la primavera, por alimentar el fuego, es considerada como un combustible y su energía se expande en todas las direcciones.
El fuego representa la culminación del ciclo de vida, su color es el rojo, la estación del año es el verano y su energía se expande hacia arriba.
La tierra es el momento de pausa en el ciclo vital, su color es el amarillo, representa el cambio entre las estaciones del año, es sólida, fija y variable al mismo tiempo, y su energía se mueve horizontalmente.
El metal es el puente del ciclo de los elementos, su color es el blanco y tonos metálicos, su forma es circular, la estación es el otoño y, su energía se mueve por dentro.
El agua representa el comienzo de un nuevo ciclo, su forma es ondulada, y su color es el negro o azul, la estación del año es el invierno y la energía es penetrante y flexible, así como las características reales de este elemento.
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