Aprender a meditar
La meditación es una práctica que conlleva a un estado de atención y concentración sobre aspectos que pueden ir desde objetos externos, hasta el pensamiento, la conciencia o el propio estado de concentración.
El verbo “meditar” viene del latín “meditatio” y que hace referencia principalmente a la actividad intelectual. Sin embargo en el ámbito religioso y espiritual se le ha dado un significado mucho más profundo que hace referencia a la contemplación. Por otro lado los tipos de meditación se encuentran fuertemente vinculados a la disciplina del yoga que suele llevarse a cabo con el fin de lograr un estado de conciencia algo más elevado que el que habitualmente se posee.
Para poder dar una ejemplo más claro acerca de cómo meditar, podemos decir que la meditación se caracteriza por factores como el estado de concentración sobre la realidad del momento presente; la focalización de la mente en un único objeto de percepción que puede ser una figura religiosa, la propia respiración, o la repetición de algún mantra. Incluso puede tomarse como un análisis de razonamiento acerca de ciertas enseñanzas religiosas, y también se comprende como meditación a un estado experimental en donde la mente se disipa y se libera de los propios pensamientos. Si bien esta práctica tiene una inevitable connotación religiosa, la misma puede llevarse a cabo con el solo propósito de llevar una buena salud física y mental. El "cómo meditar" asegura que las diferentes técnicas de meditación se clasifican según cual sea su enfoque.
Es importante tener en cuenta que muchas personas se enfocan al campo correspondiente a la percepción y la experimentación, mientras que otras simplemente se enfocan en un objeto determinado y se trata más de lograr una cierta concentración en el mismo. De todos modos es importante destacar que la cantidad de técnicas de meditación que se emplean es realmente muy grande y cada una de ellas dependerá de la persona que la lleve a cabo, pero la mayoría de las personas que suelen meditar a menudo, suelen utilizar la respiración como centro de enfoque ya que la misma representa el puente entre el cuerpo físico, el estado de animo y el estado mental. Sentarse a meditar, al menos dos veces por semana, puede resultar de gran ayuda para aquellas personas que sufren de stress o nerviosismo, y hasta en casos de ansiedad compulsiva, pero en aquellos casos donde se presenta algún trastorno psíquico grave, es mejor que la práctica de la meditación se deje de lado, ya que la misma puede provocar el resurgimiento de traumas y emociones que en una persona que no se encuentra mentalmente sana, puede derivar en reacciones violentas contra si mismo y contra los demás.
Meditacion religiosa
La mayoría de las religiones poseen diferentes procesos y maneras de llevar a cabo la meditación, y en la mayoría de las culturas, la misma es considerada como un proceso mental con el fin de transmitir estabilidad a los adoctrinados.
En este aspecto, podemos mencionar de algunas tradiciones místicas que se encuentran presente en todas las religiones; por ejemplo, El Taoismo, el Shamanismo en todas sus expresiones, el Dzochen en el budismo y el Zen, el camino sufi del Islam, la contemplación o rezo en el cristianismo. Además como bien habíamos mencionado al principio del artículo, la meditación resulta ser el eje principal en disciplinas tales como el yoga, las artes marciales, el Tai Chi Chuan.
De todos modos es importante tener en cuenta que se puede aprender de los diferentes tipos de meditación sin necesidad de tener algún credo religioso, aunque las técnicas más populares que se utilizan para meditar suelen provenir de religiones conocidas en Oriente, como el budismo y el hinduismo. Un dato importante que no queremos dejar pasar es que a comienzos del siglo XX, la mayoría de las técnicas utilizadas para llevar a cabo la meditación, eran muy ocultas y solo se transmitían en minorías sociales que se encontraban realmente intensadas en una vida de sacerdocio. Pero como podemos apreciar en la actualidad, en el transcurso del siglo XX esto ha ido evolucionando a tal punto que hoy en día, la meditación es una práctica común que lleva a cabo la mayoría de la población mundial. Como podemos ver, todos y cada uno de nosotros es capaz de desarrollar en su interior cualquier tipo de técnica que pueda ser útil para llevar a cabo una buena meditación, y ésta es una actividad que se recomienda mucho, especialmente si tenemos en cuenta las situaciones de Stress y nerviosismo a las que nos encontramos expuestos día tras día.